Musicoguia Magazine ha entrevistado a Sofía Marín Cepeda, profesora en el Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal de la Universidad de Valladolid. Obtuvo el Premio Fin de Carrera por la Universidad de Valladolid y Premio Extraordinario de Doctorado. Su principal línea de investigación se centra en la educación patrimonial y la inclusión de colectivos con capacidades diferentes. Actualmente, se desarrolla a través del estudio de los vínculos que las personas establecen con los bienes, definiendo el vínculo como espacio de inclusión.
ENTREVISTA
1. ¿Cómo fueron tus primeros inicios con el arte?
Siempre he sentido un interés especial por la expresión artística (plástica y musical). Tras cursar Magisterio de Educación Primaria, cuando me encontraba terminando los estudios de Psicopedagogía, fui contratada como educadora en el Departamento de Educación e Investigación del Museo Patio Herreriano de Arte Contemporáneo Español de Valladolid, donde tuve la oportunidad de colaborar con profesionales de la educación en museos e iniciarme en proyectos de educación artística par la inclusión social. El contacto con el arte contemporáneo fue revelador, lo que me animó a matricularme en el Programa de Doctorado en Aplicaciones del Arte para la Integración Social de la Universidad de Valladolid y, posteriormente, cursar el Grado en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca.
Desarrollé mi tesis doctoral con una Beca de Formación de Personal Investigador del Ministerio de Ciencia e Innovación, entrando a formar parte del equipo de investigación del OEPE: Observatorio de Educación Patrimonial en España, liderado por la Dra. Fontal Merillas desde la Universidad de Valladolid. Sin duda, formar parte de este equipo, integrado por profesionales de muy diversas disciplinas, supuso también un gran impulso en mi formación académica e investigadora en torno a las artes y al patrimonio.
Más allá de mi formación y carrera académica, durante los últimos años he iniciado una línea artística en torno al lenguaje audiovisual (fotografía y vídeo), participando en exposiciones colectivas en centros artísticos españoles y recibiendo dos premios por la Universidad de Salamanca. La expresión artística y la experimentación de procesos creativos ha supuesto para mí un cambio en la forma de mirar, ver y entender el mundo, con una importante influencia en mi carrera profesional y en mi vida personal. Ha sido, además, una oportunidad de conocer y colaborar con un amplio y valioso equipo humano al que manifiesto mi más sincero agradecimiento.
2. Dada tu formación académica donde se conjugan muy bien el lado artístico y educativo ¿Cómo piensas que las artes pueden contribuir a una mejor educación holística?
Tal y como defendía Giner de los Ríos, la educación es dirigir con sentido la propia vida. El arte y los procesos creativos nos conectan con nosotros mismos y con el otro. Apela a nuestra libertad y a la responsabilidad de ocuparnos de nosotros mismos, en el sentido de construir nuestro propio relato y nuestra forma de estar en el mundo. El arte, su educación y los procesos creativos se ocupan de la emoción, de lo simbólico, de la supervivencia del ser, del pensamiento crítico, de la reflexión, de la mirada sobre uno mismo y sobre el mundo. Se trata de pensar haciendo, aprender haciendo, más allá de los procesos memorísticos. La educación artística se ocupa de otros modos de acceder al conocimiento, más allá del método científico, a través de procesos de creación que nos permiten dialogar con nosotros mismos y con el mundo, subrayando nuestra individualidad, originalidad e identidad.
Recientemente, en las XII Jornadas de Educación Artística en clave 2.0., Marián López Fernández-Cao, catedrática de Educación Artística, ofrecía una interesantísima conferencia en torno a la cuestión. En su conferencia abordaba, precisamente, la importancia de la educación artística en la formación integral, más aún en tiempos de pandemia. La educación artística ha sido y sigue siendo una disciplina en constante justificación. Nos permite, siguiendo a López Fernández-Cao, conocer la realidad con otros ojos, extrañar lo conocido, encontrar nuevas posibilidades, afrontar conflictos, desarrollar la mirada atenta. La atención es, precisamente, un elemento fundamental en la relación humana y en los procesos de aprendizaje. Citaba, en este sentido, a Simone Weil, quien defendía la atención como elemento clave en el conocimiento. La atención exige la plena implicación personal en el presente, la superación del narcisismo. En este sentido, el proceso creador es un proceso de escucha atenta hacia la materia.
Durante el curso 2019-2020, los profesores nos vimos ante la obligación y la necesidad de adaptar nuestras asignaturas para afrontar un curso atípico marcado por la distancia, por la ausencia de la mirada y la virtualización de la relación profesor-alumno. Sometí a una redefinición el plan de prácticas que había planificado para mi alumnado de magisterio en la asignatura “Fundamentos de la educación plástica y visual”. Más allá de las dificultades surgidas propias de los procesos de enseñanza/aprendizaje y del cambio metodológico, me sorprendió enormemente la gran capacidad de superación y adaptación de mi alumnado y el incremento de su interés en la asignatura, reflejado en las reflexiones que me transmitieron en torno a la necesidad y la importancia que habían adquirido para ellos los procesos creativos durante los meses de duro confinamiento. Desde mi punto de vista, quizás fue motivado por la emergente necesidad de expresión más allá de la palabra, por la necesidad de elaborar los procesos de duelo, la expresión del miedo y otras emociones, así como la incertidumbre, la necesidad de afrontamiento y comprensión del cambio, el encuentro con uno mismo, lo que otorgó a las prácticas un cierto tinte terapéutico marcado por esa urgencia expresiva y la motivación excepcional que se despertaba en los alumnos hacia la expresión artística.
3. ¿Con qué argumentos crees que se puede convencer a los padres de la importancia que tienen las artes y el estudio del patrimonio en el desarrollo de sus hijos?
Más allá de los argumentos expuestos, que encierran claves fundamentales en la defensa de la importancia de las artes y el patrimonio en el desarrollo integral de las personas, conviene tener en cuenta la necesidad de una educación que se ocupe del individuo en su totalidad y complejidad, a través de una ley y un sistema educativo que otorgue la importancia académica que la educación artística tiene.
Recientemente se ha generado la plataforma “Educación no sin artes”, gracias al esfuerzo e implicación de un amplio equipo de profesores y profesoras de educación artística en nuestro país, reclamando una mayor presencia de la educación artística en todos los ciclos de la enseñanza. Se ha redactado un manifiesto y un decálogo con argumentos clave para el cambio de la ley educativa vigente. De entre todos los argumentos que recoge, quiero destacar la importancia de una educación ética y responsable que dote de instrumentos críticos y, en este punto, la referencia a Hannah Arendt: debemos preservar lo nuevo que cada generación trae consigo, pues esa novedad puede ser la promesa de un mundo mejor.
Siguiendo con el manifiesto, la educación artística es necesaria en la escuela para el uso competente de los lenguajes visuales y audiovisuales, para el pensamiento crítico, para la comprensión de lo simbólico y lo estético, para el aprendizaje de la cultura, para el uso de los lenguajes y la creación visual, para el conocimiento a través de la mirada y los sentidos. El arte es uno de los pilares fundamentales de nuestras sociedades. Es, además, necesario para ejercer otras prácticas, oficios y profesiones necesarias para la vida en común. El patrimonio, su apreciación, necesita de miradas sensibles y responsables.
https://educacionnosinartes.wordpress.com/manifiesto-educacionnosinartes/
4. ¿En qué proyecto/s estás trabajando en la actualidad que te gustaría compartir con nuestros lectores?
Desde que se creó en 2010, tengo la suerte de formar parte del equipo del ya más que consolidado Observatorio de Educación Patrimonial en España (www.oepe.es), liderado por la Dra. Fontal Merillas desde la Universidad de Valladolid. Además, formo parte de la RED14, que agrupa los principales equipos de investigación que trabajan en España en campos como la educación patrimonial, histórica, la construcción de identidades, entre otros. Formar parte de equipos y redes de trabajo resulta fundamental para el crecimiento personal y disciplinar, pues facilita el intercambio de experiencias, la formación de investigadores, la consolidación de redes de investigación, la difusión y la visibilidad de la investigación que desarrollamos, entre otros. Se configura así una genealogía académica que permite el crecimiento personal en el marco de una rica red de profesionales de muy diversas universidades y de formación multidisciplinar.
Por otro lado, la actividad docente es, en sí misma, campo de investigación. En este sentido, la continua evaluación, revisión y actualización de mis métodos docentes y planes de prácticas me ha permitido iniciar una línea de investigación en torno a los modelos y las prácticas de educación artística. Recientemente, mi línea se orienta hacia la comprensión de los vínculos que las personas establecemos con los bienes y con los nuevos contenidos, así como la perspectiva de género y su impacto en el desarrollo de la disciplina.
ORCID :00-000000-0383-0408
Researcher ID: D-4859-2011
Scopus Author ID: 57194169833
http://feyts.academia.edu/Sof%C3%ADaMar%C3%ADnCepeda
https://scholar.google.com/citations?hl=en&user=mWLSYzYAAAAJ
https://journals.openedition.org/midas/1317
¡MUCHAS GRACIAS!
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